Potrero de los Funes, en la provincia de San Luis, Argentina, tiene una historia rica y singular. Originalmente habitado por comunidades indígenas, el área fue colonizada por los españoles en el siglo XVIII.
Durante el siglo XX, la región experimentó un impulso significativo con la construcción de un circuito de carreras en 1952, convirtiéndose en un destino emblemático para competiciones automovilísticas.
El lago, de origen volcánico, ha sido clave en el desarrollo turístico. La localidad, con su arquitectura pintoresca y ambiente tranquilo, ha atraído a visitantes en busca de naturaleza y actividades recreativas.
Potrero de los Funes ha evolucionado desde un pequeño pueblo hacia un destino turístico destacado, manteniendo su encanto histórico y su conexión con el automovilismo.