Concepción del Uruguay, con su rica historia, atractivos culturales y entorno natural, es un destino que combina la tradición con la modernidad, ofreciendo a los visitantes una experiencia completa en el corazón de Entre Ríos.
Concepción del Uruguay cobra vida con festivales y eventos culturales.
La Fiesta Nacional de la Playa es un destacado evento veraniego que atrae a visitantes con actividades recreativas, espectáculos y celebraciones junto al río.
Las Termas de Concepción ofrecen aguas termales con propiedades terapéuticas.
Este oasis de bienestar invita a los visitantes a relajarse en piscinas termales, saunas y tratamientos de spa, proporcionando una experiencia única de rejuvenecimiento.
Este extenso parque inaugurado en 1900 ofrece un oasis de tranquilidad.
Con lagos, senderos arbolados y áreas de recreación, es un lugar ideal para pasear, hacer deporte o simplemente disfrutar de la naturaleza en el corazón de la ciudad.
Accesible por barco, la Isla Cambacuá en el río Uruguay es un refugio natural.
Con playas tranquilas, bosques exuberantes y áreas para la observación de aves, es un destino para quienes buscan conectar con la naturaleza.
Este museo, ubicado en un edificio histórico, alberga una colección que narra la historia de Entre Ríos y sus figuras destacadas.
Exhibiciones de arte, documentos y objetos ofrecen una mirada profunda a la rica herencia de la región.
Construido en 1892, el Teatro 3 de Febrero es uno de los teatros más antiguos de Argentina.
Su arquitectura majestuosa y su rica historia lo convierten en un escenario cultural destacado, donde se disfrutan obras de teatro, conciertos y eventos culturales.
La Plaza Ramírez, en el centro histórico, es el corazón de Concepción del Uruguay.
Rodeada por edificios emblemáticos, la plaza alberga el monumento a Francisco Ramírez, recordando al líder federal que desempeñó un papel clave en la región.
La Casa de Urquiza, residencia histórica del caudillo Justo José de Urquiza, es un emblema arquitectónico que transporta a los visitantes al siglo XIX.
Sus salas restauradas y jardines ofrecen una ventana a la vida de uno de los líderes más influyentes de la historia argentina.