La historia de Copahue se remonta a tiempos precolombinos, cuando la zona era habitada por pueblos indígenas mapuches. Estos grupos nativos reconocieron desde hace siglos las propiedades curativas de las aguas termales que brotan en la región.
En la época colonial, los españoles también descubrieron las termas de Copahue y las utilizaron con fines terapéuticos.
Durante el siglo XIX, la zona experimentó un aumento en la actividad minera y se extrajeron minerales como el azufre y el yeso.
A medida que se fueron reconociendo los beneficios para la salud de las aguas termales, Copahue comenzó a desarrollarse como un destino turístico y de bienestar a principios del siglo XX. Se construyeron infraestructuras para alojar a los visitantes y se promovieron las propiedades curativas de las termas.
En la década de 1980, se creó el Parque Provincial Copahue, con el objetivo de preservar y proteger el entorno natural de la zona. Además de las termas, el parque también alberga el volcán Copahue, uno de los volcanes más activos de la región.
Hoy en día, Copahue es reconocido tanto a nivel nacional como internacional por sus aguas termales y su belleza natural. Miles de turistas visitan cada año para disfrutar de los beneficios terapéuticos de las termas, hacer senderismo en los alrededores del volcán y disfrutar de la tranquilidad y la belleza de este rincón de la Patagonia argentina.